¿VALE LA PENA EXPONER LA VIDA EN LAS CIRUGÍAS PLÁSTICAS?
Desde el primer momento en que aparecieron las cirugías plásticas, todas las mujeres tienen la posibilidad de cambiar su aspecto físico, ya no es necesario pasar horas en un gimnasio, ni hacer largas dietas para tener un cuerpo bello, ya que la obsesión que tienen muchas mujeres por tener un buen cuerpo las ha llevado a no impórtales exponer su vida al momento de entrar a un quirófano, y ni el precio que tengan que pagar en estas operaciones.
Las mayorías de mujeres que se hacen estas operaciones, es dado a que su nivel de autoestima es muy bajo, ya que no se siente augusto y tratan de modificar permanentemente lo que nos dio la naturaleza, aunque hay algunas mujeres que se hacen cirugías porque anteriormente han sufrido alguna quemadura o accidente y necesitan reconstruirse el rostro, ya que ser perfectas es la atracción de muchos hombres.
Gracias a estas intervenciones estética, la sociedad Colombia ha crecido en los ultimos tiempos, gracias ha que son muchas las mujeres que mensualmente están acudiendo a cirujanos para que les hagan intervenciones quirurjicas.
“¿Y por qué ocurre este fenómeno? En los años 90, cuando los problemas de narcotráfico invadían el país, los “narco-dólares” permitieron que muchas mujeres tuvieran fácil acceso a las cirugías estéticas. La alta demanda de esta práctica generó una mejor calidad del servicio y los precios eran cada vez más bajos.
El Doctor Edilson Machabajoy López afirma que las motivaciones para someterse a una cirugía plástica se relacionan con lograr un valor agregado. “Muchas veces quieren recuperar una relación amorosa o conseguir un mejor trabajo. Sin embargo, son falsas ilusiones. Los resultados de la cirugía pueden traer problemas psicológicos y resultados poco satisfactorios por el paciente”.
